Cuando se evalúa un paciente por una enfermedad, hay dos formas de hacerlo:

1- Evaluando el individuo como un todo (sistémicamente) tomando en cuenta no solamente la enfermedad y sus síntomas, sino el ambiente que lo rodea tanto en el trabajo como en su casa y familia; además, lo que le pasa personalmente desde el momento que se inicia la enfermedad; cómo van apareciendo los síntomas, lo que se encuentra en el examen físico, los resultados de exámenes de laboratorio, y después de analizar todo ello, es cuando se llega a un diagnóstico y se plantea el tratamiento más adecuado para ese paciente.

2- Evaluando al individuo centrado, solamente, en los síntomas que presenta en un momento determinado (linealmente); se diagnostica y se da un tratamiento determinado para esos síntomas o enfermedad. Por ejemplo, si tiene diarrea se da un antidiarreico, si tiene fiebre se da una pastilla para la fiebre. Pero, muchas veces esos síntomas son la expresión en un órgano, de un problema que existe en otros órganos; o de un problema más general del individuo y el motivo por el cual consulta es solo la expresión de otro problema.
La Enfermedad Covid-19 es una enfermedad infectocontagiosa, Viral Compleja que, cuando el individuo tiene un sistema inmune funcionando bien, y responde bien, da pocos síntomas. Tales como fiebre, malestar, dolor de cabeza, decaimiento, dolores musculares y tos con dificultad para respirar.
El virus penetra por las mucosas de la nariz, la boca o los ojos. Luego, pasa a las células del pulmón y allí, comienza en los PULMONES la primera lucha del sistema inmune, se produce una neumonía. En esta etapa de la enfermedad, solo conseguiremos afectación del área respiratoria.

Pero, cuando el sistema inmune no responde bien, sigue evolucionando la enfermedad y triunfa el virus, éste va pasando a la sangre y a otros órganos; entonces, se origina una Respuesta Inflamatoria Global muy intensa, que si no logra el cuerpo superar la situación, pasa a una etapa de Sepsis, con una respuesta multiorgánica y muchos órganos del cuerpo tratan de defenderlo y superar la situación, y si no la superan el paciente entra en Shock y muerte.
El médico puede ser llamado para evaluar el paciente en cualquiera de esas etapas y por supuesto, los síntomas y lo que el médico va a encontrar al examinar el paciente será DIFERENTE, según la etapa de la enfermedad en la cual se encuentre el paciente evaluado.
Entre las complicaciones en la etapa severa de Sepsis y Shock del paciente, está la Coagulación Intravascular Diseminada y la Trombosis. Luego, si se hace una AUTOPSIA es porque el paciente murió, y presentó todos esos signos de las etapas más graves tal como la trombosis.
Aun cuando se vean esos signos, en una autopsia, hay que pensar en el tipo de enfermedad y la evolución que ella tiene para poderse explicar lo que sucede. Y además, es fundamental evaluar el paciente como un todo, tal y como se refirió anteriormente en el punto 1, y el médico tendrá que dar el tratamiento más adecuado a las características del paciente y a la etapa de la enfermedad en la cual se encuentra ese paciente.